Domingo, 8 de marzo. Centro Cívico. Sesiones 17:00 y 19:30 h
Con 6 nominaciones a los Premios Oscar y numerosos reconocimientos y premios de Círculos y Asociaciones de Críticos, Productores y Guionistas americanos, la película “Mujercitas”, adaptación de la novela homónima de Louisa May Alcott, publicada en dos partes entre 1868 y 1869, es un clásico de la literatura femenina que ya tuvo diversas versiones para cine y television. Llega ahora de la mano de la guionista y realizadora Greta Gerwig, una versión clásica y moderna, respetuosa y renovadora a la vez, que quiere hablar a las nuevas generaciones sobre una historia que reivindica las búsquedas personales sobre los condicionamientos sociales.
Basada en la reconocida novela homónima de Louisa May Alcott, «Mujercitas» narra la historia de las cuatro hermanas March -Amy, Jo, Beth y Meg- que se van haciendo adultas en un contexto bélico. La Liga de Secesión de Estados Unidos ha afectado a sus vidas y, tras su final, todas tendrán que luchar por reconstruir las grietas que esta convulsa contienda ha supuesto en sus vidas.
Louisa May Alcott tenía 35 años cuando, a través de su padre, el trascendentalista Bronson Alcott, recibió el encargo de escribir un “relato de chicas”. Roberts Brothers, el sello que se lo encargaba, estaba al tanto de su “habilidad literaria” y quería que la pusiera a disposición de un fin mayor: “formar a mujeres” haciendo de puente entre “el aula y el salón”, aconsejando “sumisión, matrimonio y obediencia, en vez de autonomía y aventura”, como cuenta Elaine Showalter en su prólogo a la edición Penguin Clásicos. Louisa May Alcott aceptó y acabó escribiendo un clásico justamente sobre todo lo contrario. Alcott fue, sin saberlo, una de las primeras feministas de la historia. Defendió no solo su derecho a no casarse, ganarse la vida por sí sola y descubrir y cultivar su yo, sino que animó a las mujeres a hacerlo.
Desde su publicación en 1868, Mujercitas le ha estado diciendo a las niñas lectoras que no hay una sola forma de ser mujer, y que pueden soñar con escapar a todo aquello que se espera de ellas. Su enorme influencia en la cultura popular no ha decaído desde entonces, como demuestra la avalancha de publicaciones que ocasionó en 2018 su 150º aniversario, y el estreno de una nueva versión cinematográfica (que se suma a tres célebres adaptaciones anteriores), dirigida por la que tal vez sea la directora más cool del momento, Greta Gerwig, que ha dado una vuelta de tuerca feminista a la historia de las cuatro hermanas March, contada por Jo, la díscola aspirante a escritora.
La directora Greta Gerwig se desmarca de sus predecesoras empezando su historia donde las demás acaban, es decir por la definitiva conversión de Jo March en novelista. A partir de ahí la película se construye dando paso intermitente a su memoria: la nostalgia familiar de una mujer que descubre que lo domestico también es un poderoso material literario.
Una película brillante y encantadora, que habla de mujeres en una época y en un contexto diferentes, pero no exenta de un discurso feminista interesante. Muy recomendable para ver en familia, justamente en coincidencia con el Día Internacional de la Mujer.